Patricia Pérez Castañer
El Grupo de Estudios Masinos celebra este año el 40 aniversario del Museo de Mas de las Matas. Aunque previamente, en unas fiestas de San Agustín, se expusieron restos arqueológicos en las antiguas escuelas de la plaza de la Iglesia, fue en 1985 cuando se inauguró el Museo con la sala ubicada en la Alfarda. En ella se agrupaban esos primeros hallazgos del programa Misión Rescate y otros que, junto con los que vinieron más tarde, conformarían la colección del actual Museo. La inauguración fue exclusivamente para las autoridades, dejando para 1986 la apertura para el público general. La sala se vistió con estanterías y con vitrinas de cristal para las piezas más pequeñas, con unas entrañables cartelas hechas con máquina de escribir, al igual que las fichas de inventario. Se realizaron guías y algunos carteles explicativos que ubicarían históricamente las grandes dolias íberas que tanto llamaban la atención del visitante, acompañados de bifaces y otras piezas de interés. En 1987 le siguió la sección de Bellas Artes en la sala contigua. Su objetivo era llenar el vacío cultural que existía y existe en la mayoría de pequeñas poblaciones, que se ven privados de esta oferta. Después se continuó con la sección de Paleontología donde los troncos fósiles ubicados en el centro de la sala eran las piezas protagonistas. Dinópolis todavía no existía y Galve y Mas de las Matas se convirtieron en los referentes museológicos de la paleontología turolense de aquellos años. La creación de las secciones del Museo fue fruto de los diferentes intereses de los integrantes del grupo y no un modelo premeditado que imitara las colecciones de los antiguos museos de corte decimonónico. Estas salas se acompañaban de otros servicios como el archivo histórico, la biblioteca, catalogación, restauración, etc.
En 1992 el Museo se integró dentro del Sistema de Museos de Aragón dando así un sello de calidad frente a los numerosos centros de interpretación que surgirían después. Con esta declaración la D.G.A. otorgó al G.E.MA. la gestión y organización del Museo, como no podía ser de otra manera, al ser los propietarios de las piezas. Aunque agradecidos eternamente a la Alfarda por la cesión de las salas, el Grupo deseaba encontrar un lugar más apropiado para su exposición y se pensó en Casa Feliú. En un primer momento, a los miembros del Grupo no les tembló la mano y pusieron dinero de su bolsillo para la compra del inmueble, mostrando su férreo compromiso con el proyecto. Finalmente, se llegó a un acuerdo con el Ayuntamiento y esas cantidades se reembolsaron. El convenio con el Centro para el Desarrollo del Maestrazgo-Teruel, que incluía el Museo y el Molino harinero de Mas de las Matas y la Almazara de Jaganta, sirvió para financiar las obras. En 1994 el Ayuntamiento de Mas de las Matas cede el edificio de Casa Feliú al Grupo para el uso museístico. Con el cambio de siglo, en 2002 se firma un nuevo convenio con el IAF para la adecuación de una sala de Paleontología, que se integrará en el proyecto Dinópolis. En 2008, con la creación de las Comarcas, los museos pasan a ser competencia de éstas pero la financiación comarcal nunca llegó, teniendo que prescindir tristemente de los servicios de Ana Mari Royo. Cabe recordar que fue y es un Museo creado y gestionado por el G.E.MA., a base de esfuerzo y trabajo voluntario ininterrumpido durante estos 40 años. Y casi sin saberlo se hacían realidad (junto con Molinos) las teorías de la Nueva museología que hoy reconoce la comunidad científica universitaria. En el panorama museístico actual, el Museo de Mas de las Matas es una rara avis, ya que no es común encontrar una colección particular, propiedad de una asociación sin ánimo de lucro, en un edificio municipal. Sorprendentemente, a día de hoy se sigue reclamando a la Comarca del Bajo Aragón financiación para su gestión y mantenimiento.
En 2023 el G.E.MA. adquirió con medios propios la denominada Casa de las Lunas, haciendo realidad otro sueño del Grupo, salvar un espacio emblemático de la localidad a la vez que se destina un espacio para retratar los aspectos etnográficos singulares de la vida masina antes de la globalización. Agradecer desde estas líneas también a la familia Guillén-Perdiguer que recientemente nos ha donado los muebles que se han podido salvar de su casa familiar y esperamos poder mostrarlos en esta nueva ubicación. Otro de los retos que tiene el museo es la necesidad de encontrar un espacio para exponer toda la obra pictórica y escultórica que atesora de manera conjunta el Ayuntamiento y el G.E.MA., después de más de 40 años de donaciones y adquisiciones. La colección que se puede ver de manera digital en la web www.grupodeestudiosmasinos.es sigue esperando un lugar que muestre de manera permanente el panorama artístico bajoaragonés de estos últimos años. En el momento actual, el Museo no puede dejar de lado el mundo digital y se están realizando gestiones para incorporar todas las piezas del Museo en el proyecto del Ministerio de Cultura Cer.es Colecciones en red para mejorar el acceso a las piezas por parte de la comunidad científica e investigadora.
Ahora, a algunas personas nos toca recoger los frutos y celebrarlo, pero sin olvidarnos en ningún momento de todas las personas que han pasado por el Grupo, trabajando para que el Museo fuera lo que hoy en día es, un motivo de orgullo para los masinos. Un cofre donde guardamos las piezas del tesoro, que es nuestra historia y nuestra cultura. También hay que recordar a los poderes públicos, DGA, DPT, IAF, y sobretodo al Ayuntamiento, la administración pública más cercana e involucrada actualmente. También a Ibercaja, que financió la musealización de las salas 5 y 6 del Museo. Sirvan estas líneas para agradecer a estas administraciones y también para reclamar y dar un tirón de orejas a aquellas que aún teniendo la competencia no lo hacen. Las infraestructuras sin presupuesto se agotan y se dejan languidecer hasta el cierre, en el Mas, seguiremos luchando para que eso no ocurra. A la Alfarda, fiel colaboradora desde el principio, que sin duda con la suma de sus dos edificios, el Molino y la sala de la Alfarda aumenta el valor de la visita. Cuántas caras de asombro hemos visto al abrir el Molino, cuantos oooohhhh! se han escuchado. Nadie lo espera y sigue siendo una grata sorpresa para locales y visitantes.
Este año toca celebrar, y de la mano del I.E.T. se van a preparar algunas actividades de las que ya podemos adelantar:
>> La grabación del programa de Aragón Radio, Historia de Aragón la tarde del sábado 26 de julio en el Molino harinero a las 19:00h.
>> Inauguración de la última sala del Museo dedicada a los siglos XVII y XVIII en las fiestas de agosto.
>> En septiembre y octubre se prepararán otras actividades relacionadas con la paleontología, además de la presentación del libro Nueva Museología de Sonia Sánchez, de las que iremos puntualmente informando.
Museo de Mas de las Matas, te deseamos unos felices 40 y desde el G.E.MA. seguiremos trabajando para llegar a los 50.